Vecinos de Castilla y León protestan contra las macroplantas de biogás

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La manifestación de los vecinos de Castilla y León coincide con la IV Feria del Gas Renovable en la Feria de Valladolid. Esta denuncia la amenaza medioambiental que sufre el medio rural.

Los vecinos de Castilla y León, unidos bajo el lema ‘Ni en tu pueblo ni en el mío‘, protestan este martes frente a la Feria de Valladolid contra la instalación de macroplantas de biogás. La movilización persigue el objetivo de frenar un modelo industrial que «atenta contra el paisaje, la salud pública y las infraestructuras del mundo rural». La concentración empezará a las 18.30 horas.

Protesta frente a la Feria de Valladolid

El próximo 1 de octubre, los vecinos de Castilla y León se van a manifestar frente a la Feria de Valladolid. La protesta, organizada coincidiendo con la IV Feria del Gas Renovable, está liderada por la plataforma ‘Ni en tu pueblo ni en el mío‘. Esta plataforma se opone a la instalación de macroplantas de biogás en zonas rurales de la comunidad castellanoleonesa. La principal queja es que estas plantas, bajo la excusa de gestionar los residuos de las macrogranjas, suponen un peligro para el medio ambiente y las comunidades locales.

Rechazo a un cuestionable modelo de progreso

Aunque los manifestantes no se oponen a la producción de gas a partir de residuos orgánicos, sí denuncian que el modelo actual solo beneficia a las grandes empresas y perjudica a los habitantes locales. Las constantes promesas de progreso por parte de las gasistas, dicen, ignoran los riesgos e inconvenientes que conllevan estas instalaciones: el tráfico constante de camiones, los malos olores, los insectos, y la degradación del paisaje y de las ya precarias infraestructuras rurales. Para la plataforma, el precio a pagar por este supuesto progreso es demasiado alto.

Impacto ambiental y sobre la salud

Uno de los principales temores de los manifestantes es la contaminación que podrían generar estas macroplantas. Según ellos, los residuos obtenidos en los procesos de fermentación contienen sustancias químicas, metales pesados y pesticidas, que pueden filtrarse al suelo y a los acuíferos. En algunas zonas, los acuíferos ya están contaminados hasta el punto de resultar inservibles para el suministro de agua potable. La plataforma alerta de que, lejos de ser una solución renovable y sostenible, estas macrocentrales podrían empeorar la situación medioambiental de la España vacía.