
Valle del Hidrógeno de Burgos: Impulso estratégico en CyL
El primer proyecto de hidrógeno de la región crea 2.000 empleos y reduce 152.000 toneladas de CO₂ al año
El Valle del Hidrógeno de Burgos se consolida como el motor de una nueva era en Castilla y León. Con una inversión de 20 millones de euros y la colaboración entre entidades públicas y privadas, este ambicioso proyecto promete generar 16.800 toneladas de hidrógeno verde y transformar la infraestructura industrial y energética de Burgos.
Un proyecto emblemático para la región
El consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, presentó en Burgos el primer Valle del Hidrógeno de la región, denominado CylH2Valley. La iniciativa se ubicará en el Polígono Industrial de Villalonquéjar y marca un hito en la estrategia de descarbonización de la región castellanoleonesa, combinando la producción y el consumo de energías limpias.
Detalles técnicos y medidas
- Producción y sostenibilidad: El proyecto producirá 16.800 toneladas de hidrógeno verde al año mediante electrólisis, utilizando fuentes renovables y reducirá las emisiones de CO₂ hasta en 152.000 toneladas al año.
- Empleo e inversión: Se prevé la creación de 2.000 empleos directos e indirectos en los próximos 10 años, con una inversión total apoyada por 20 millones de euros de fondos europeos, dentro de un plan global de más de 385 millones de euros.
- Cadena de valor completa: La iniciativa abarca desde la producción y compresión hasta la distribución, almacenamiento y consumo, situando a la provincia de Burgos como referente en hidrógeno verde.
Cooperación público-privada y apoyo institucional
El éxito del proyecto se basa en la sinergia entre diferentes actores: Ayuntamiento de Burgos, Universidad de Burgos (UBU), Asociación Castellano-Leonesa del Hidrógeno (H2CyL), Junta de Castilla y León y Cartif. Además, la Comisión Europea ha reconocido la relevancia del plan a través del programa Horizonte. Este modelo de colaboración es un ejemplo de cómo los esfuerzos conjuntos pueden acelerar la transición energética y promover el desarrollo sostenible en la región.
Perspectivas y desafíos futuros
El ambicioso plan se implementará en fases, comenzando en 2025 con la instalación de proyectos piloto y culminando en 2029 con la implementación final del proyecto. El reto es garantizar las redes de suministro y distribución de hidrógeno, un aspecto crucial para el Valle del Hidrógeno de Burgos, no solo para consolidar su capacidad de producción, sino también para posibilitar el autoconsumo energético y la competitividad industrial a largo plazo.
El compromiso con el consumo local y la integración de la cadena de valor es clave para transformar tanto la economía local como el panorama ambiental.