Castilla y León: líder en Servicios Sociales, pero en riesgo por la financiación
Un sistema de Servicios sociales ejemplar que enfrenta nuevos retos económicos
Castilla y León ha vuelto a demostrar por qué es líder en Servicios Sociales en España. Según el Índice DEC 2023 elaborado por la Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales, la comunidad ha superado una vez más la media nacional, obteniendo la máxima puntuación entre las autonomías con régimen común de financiación. Este logro es una muy buena noticia, ya que los indicadores han sido más exigentes este año.
Servicios sociales en términos de derechos
Castilla y León ha obtenido una impresionante puntuación de 1,40 sobre 1,50, mientras que la media estatal se sitúa en 0,95. Esto se debe a la implementación de un plan estratégico, normas sobre ética, un comité constituido, una estrategia de investigación con presupuesto específico y una normativa sobre la Historia Social Única. La comunidad castellanoleonesa ha demostrado su compromiso con la calidad y la transparencia en la gestión de los servicios sociales, aprobando con responsabilidad todos estos indicadores.
Además, Castilla y León se destaca por tener un sistema equilibrado, con uno de los mejores ratios entre cobertura y gasto. Este éxito se debe a la sólida red de colaboración con entidades locales para la gestión de prestaciones y servicios, y a la adecuada integración del Sistema de Atención a la Dependencia en los Servicios Sociales autonómicos. La comunidad también muestra un gran balance entre los derechos reconocidos a la ciudadanía y la entrega efectiva de prestaciones y servicios.
Servicios sociales en cuanto a cobertura
Castilla y León se sitúa por encima de la media estatal, llegando a una puntuación de 3,79 frente a 2,59. La comunidad es líder en varios indicadores, como el número de profesionales por habitante, con uno por cada 1.697 frente a los 1.764 estatales, y en dependencia, con una nota de 8,9 del Observatorio de la Dependencia frente al 5,1 nacional. También sobresale en plazas residenciales de financiación pública para mayores de 70 años y personas con discapacidad, así como en acogimientos familiares de menores y en plazas de alojamiento para víctimas de violencia machista y personas sin hogar.
A pesar de estos logros, Castilla y León enfrenta desafíos significativos. El informe indica una disminución en la relevancia económica y el gasto por habitante en servicios sociales. El gasto por habitante en servicios sociales descendió un 2,3% en 2022 respecto al año anterior, colocándose por debajo de la media nacional. También se disminuyó el porcentaje del gasto de las administraciones públicas en relación con el PIB regional, pasando del 2,12% en 2021 al 1,87%, aunque sigue por encima de la media nacional.
La Asociación Estatal informa de que la eficacia que Castilla y León ha evidenciado en la gestión de sus servicios sociales no será proporcionada para mantener su liderazgo si continúa con su pérdida de relevancia económica.
Castilla y León desde 2017 ha mantenido una de las tres primeras posiciones en la clasificación de las comunidades autónomas en el desarrollo del sistema de Servicios Sociales. A pesar del descenso en la puntuación en 2023 por la pérdida de relevancia económica, la comunidad sigue llamando la atención en la ordenación del sistema y cobertura efectiva de prestaciones y servicios.