Castilla y León reclama un fondo específico para combatir la despoblación
Castilla y León es una de las comunidades autónomas más afectadas por la despoblación, un problema que amenaza el futuro de su territorio y de sus habitantes. Según el último padrón continuo publicado por el INE, la región ha perdido 13.075 habitantes en el último año, lo que supone un descenso del 0,5 por ciento. Además, el 77 por ciento de sus municipios está en riesgo de despoblación, al tener una densidad inferior a 12,5 habitantes por kilómetro cuadrado.
Ante esta situación, el Consejo de Cuentas de Castilla y León, el órgano fiscalizador de la gestión económica y financiera de la comunidad, ha pedido la creación de un fondo específico contra la despoblación, que se repartiría entre las regiones con menor densidad geográfica. Así lo ha manifestado su presidente, Mario Amilivia, en la Comisión de Economía y Hacienda del Parlamento autonómico, donde ha presentado el análisis del programa presupuestario de servicios sociales1.
Amilivia ha defendido que la despoblación debe ser considerada como una variable a la hora de distribuir los recursos del Estado, y ha propuesto que se establezca un fondo distinto al del fondo de compensación interterritorial, que tenga en cuenta las necesidades específicas de las zonas más despobladas. Según ha explicado, este fondo serviría para financiar proyectos que favorezcan el desarrollo económico, la cohesión social y la calidad de vida de estas áreas, así como para garantizar la prestación de servicios públicos esenciales.
El presidente del Consejo de Cuentas ha señalado que Castilla y León no es la única comunidad que sufre la despoblación, y ha abogado por una colaboración entre las administraciones para afrontar este reto. Asimismo, ha reconocido que se trata de un problema complejo, que requiere de medidas a largo plazo y de una participación activa de la sociedad civil.
La despoblación es uno de los temas que ha centrado la campaña electoral de las elecciones autonómicas que se celebran este domingo en Castilla y León. Los diferentes partidos políticos han presentado sus propuestas para revertir esta tendencia y para impulsar el mundo rural, que representa el 80 por ciento del territorio y el 42 por ciento de la población de la comunidad