FITECU, pionera en nuestro país, tiende la mano a la instalación de industrias tecnológicas en el medio rural de Castilla y León y del país.
Tres días y más de mil visitantes después, la primera Feria internacional de Innovación y Tecnología al servicio de los Cuidados (FITECU) dijo adiós en la pequeña localidad de Villardeciervos (Zamora), en plena Sierra de la Culebra.
Para la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Junta de Castilla y León, Isabel Blanco, la cita ha sido un reto “que genera empleo y riqueza y fomenta la visibilidad, la igualdad y la inclusión”. Pone, además, en valor, la potencialidad de un territorio “preparado para acoger una feria de estas características”.
“Cuando hablamos de cuidados, hablamos de personas”, apuntó la consejera remarcando una máxima que ha presidido las tres jornadas de FITECU, poniendo siempre en el centro a los ciudadanos y sus necesidades.
“Queríamos llevar las tecnologías y los servicios a un territorio lleno de posibilidades y recursos que debe tener la oportunidad de mostrarlos”, destaca la consejera Isabel Blanco durante la clausura.
Para concluir, Blanco tendió la mano a las empresas que decidan instalarse en el territorio donde se ha desarrollado FITECU o en otras zonas rurales de Castilla y León y se comprometió a “seguir siendo punteros y trabajar por las personas que más lo puedan necesitar”.
Por su parte, tanto el alcalde de Villardeciervos, Lorenzo Jiménez, como Pablo Gómez, el presidente del Clúster SIVI, organizador de la cita, agradecieron el esfuerzo realizado para lograr los magníficos resultados del evento por el que han pasado 35 expertos de talla mundial y 20 empresas del ámbito tecnológico para compartir los últimos avances de la integración tecnológica en la atención a personas dependientes.
La jornada final de FITECU volvió a viajar a una vivienda de atención en red en el municipio de Boya, donde conocimos a Emeterio, una persona de 92 años que vive solo, al igual que Inocencio y Carmen, a quienes FITECU visitó en su propia casa de Villardeciervos en la jornada inaugural, o Íñigo, tetrapléjico desde hace más de tres décadas al que la tecnología ayuda a vivir dignamente en su casa de Aguilar de Tera.
Como ellos, casi cinco millones de personas viven en soledad en España. Para un alto porcentaje se trata de una situación no deseada y la tecnología los puede ayudar. Sobre ello se charló sobre el escenario FITECU poniendo el foco en la importancia de escuchar a los usuarios y conocer sus necesidades. La necesidad de poner en el centro a la persona ha sido una constante a lo largo de FITECU.
Esa idea también mueve a Lorena Paz, la última de las ponentes internacionales de FITECU. La especialista argentina que califica su trabajo de “laboratorio viviente”, analiza desde hace 18 años la relación de las personas mayores con la tecnología. Sus reacciones le permiten reclamar a los grandes fabricantes de dispositivos mayor sensibilidad para adaptarse a los requerimientos de las generaciones más veteranas.
Paz participó a continuación en la mesa redonda sobre innovación social, sostenibilidad y teoría del cambio, un ámbito en el que los expertos imaginan el futuro y se anticipan para comenzar a trabajar en futuras innovaciones.
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